Sanidad, seguridad social y pensiones
Página principal: Filipinas
1. economía y sociedad
2 Renta y nivel de vida
3 Migración laboral y empleo en el extranjero
4 Pobreza y desigualdad social
5 Bien común y solidaridad
6 Situación educativa de los niños desfavorecidos
7 Sanidad, seguridad social y pensiones
8 Reconocimiento de la labor asistencial y el compromiso
9.innovación, digitalización y modelos económicos alternativos
10.economía de proximidad y monedas paralelas
11 Potencial y retos de Gradido
12. cooperación internacional, ONG y proyectos gubernamentales de desarrollo
Sanidad, seguridad social y pensiones en Filipinas
1. acceso al sistema sanitario
¿Quién tiene acceso?
- Desde la Ley de Asistencia Sanitaria Universal (2019), el seguro médico es oficialmente obligatorio para todos los. Según cifras del Gobierno, el seguro médico estatal PhilHealth cubre a cerca del 92 % de la población, incluidos empleados formales, trabajadores informales, indígenas, ancianos y personas a su cargo.^1.
- Población urbana y clase media/alta se benefician de hospitales mejor equipados y pueden permitirse seguros complementarios o tratamientos privados.
- Empleados del sector formal suelen estar asegurados automáticamente y tienen acceso a mejores prestaciones.
¿A quién se suele excluir u olvidar?
- Población ruralSegún el Ministerio de Sanidad, 79 % de las provincias carecen de suficientes centros de atención primaria. Muchas personas tienen que recorrer largas distancias e incurrir en elevados costes para recibir ayuda médica^2.
- Trabajadores pobres e informalesA pesar de la obligatoriedad del seguro, muchos están desatendidos porque no pueden permitirse los copagos, los medicamentos (a menudo tres veces más caros que a escala internacional) o el transporte. Más del 50 % del gasto sanitario se paga de forma privada, lo que supone una carga especial para las familias pobres[^2][^4].
- Grupos indígenas y desplazados internosLas barreras lingüísticas, culturales y geográficas dificultan el acceso. A menudo dependen de centros de salud mal equipados.
- Niños, personas mayores y personas con discapacidad en regiones remotas a menudo no reciben una atención adecuada, sobre todo para enfermedades crónicas o complejas.
- Inmigrantes y asentamientos informalesA menudo quedan al margen porque no tienen un lugar de residencia fijo ni un empleo formal.
2. seguridad social
¿Quién tiene acceso?
- Sistemas de seguridad social (SSS para el sector privado, GSIS para los empleados públicos) cubren a los empleados formales. Desde 2025, los autónomos, los trabajadores informales y los "gig workers" también están mejor cubiertos, incluidas las cotizaciones flexibles y los servicios digitales^5^7.
- Remesas de emigrantes laborales garantizan la supervivencia de muchas familias, pero no sustituyen a la seguridad del Estado.
- Programas de ayuda social como las transferencias monetarias condicionadas (4P) se dirigen a los hogares más pobres.
¿Quién queda excluido u olvidado?
- Empleados informales (alrededor del 60 % de la población activa) y los jornaleros no suelen estar asegurados o lo están de forma irregular a pesar de las reformas, ya que es difícil cotizar o el registro es burocrático.^5.
- Desempleados, pequeños agricultores, pescadores y jornaleros por lo general no reciben prestaciones o las que reciben son mínimas.
- Desplazados internos y personas sin documentos de identidad suelen quedar excluidos de las prestaciones sociales.
- Mujeres, especialmente las familias monoparentalesa menudo no reciben suficiente apoyo, ya que muchos programas están adaptados al sostén de la familia masculino.
3. régimen de pensiones
¿Quién tiene acceso?
- Empleados formales perciben una pensión estatal a través del SSS (sector privado) o del GSIS (sector público). En 2025 se incrementaron las pensiones y se introdujeron programas complementarios voluntarios.^5^8.
- Mayores indigentes (sin pensión propia ni ayuda familiar) reciben una pequeña pensión social (aprox. 500-1.000 PHP/mes) si se les reconoce la condición de necesitados^9.
¿Quién queda excluido u olvidado?
- Muchas personas mayores en el sector informal o sin periodos de cotización no reciben ninguna pensión o sólo pensiones muy bajas. La pensión social para los necesitados es baja, el acceso es burocrático y el presupuesto limitado^9.
- Mujeres se ven afectados con mayor frecuencia, ya que es menos probable que hayan tenido un empleo continuo sujeto a cotizaciones a la seguridad social.
- Ancianos indígenas, rurales y pobres a menudo no se registran o tienen dificultades para demostrar que cumplen los requisitos.
- Personas con discapacidad y los ancianos con enfermedades crónicas rara vez reciben ayudas específicas.
4º resumen: ¿Quién se beneficia, quién se queda atrás?
Gama | Acceso asegurado para... | A menudo se excluyen/olvidan... |
---|---|---|
Salud | Habitantes de la ciudad, empleados formales, clase media | Pobres rurales, indígenas, inmigrantes, trabajadores informales |
Seguridad social | Empleados formales, destinatarios de las 4P | Trabajadores informales, jornaleros, desplazados internos |
Régimen de pensiones | Empleados formales, ancianos indigentes (condicional) | Trabajadores informales, mujeres, indígenas, personas muy pobres |
Conclusión
El acceso a la sanidad, la seguridad social y las pensiones en Filipinas depende en gran medida de los ingresos, la situación laboral y el lugar de residencia. A pesar de las reformas, los grupos de población rural, indígena, con empleo informal y migrante, en particular, a menudo son ignorados o sólo reciben prestaciones mínimas. La seguridad social sigue estando fragmentada y para muchos no es suficiente para evitar la pobreza y la inseguridad en caso de enfermedad o vejez.^2^4^9^7^8.
[^4]: https://www.gdn.int/sites/default/files/Philippines-Philippines Hacia la ampliación del acceso a los servicios sanitarios - Informe de simulación de políticas.pdf
Evaluación suplementaria desde la perspectiva de Gradido
El acceso a la sanidad, la seguridad social y las pensiones en Filipinas sigue estando profundamente caracterizado por las desigualdades sociales. Una vez más, son los más vulnerables -pobres, campesinos, indígenas y trabajadores del sector informal- quienes sufren las carencias y la marginación.
Reflexiones adicionales desde la perspectiva de Gradido:
- Salud: La obligación oficial del seguro de enfermedad oculta el hecho de que el acceso real depende de los medios económicos, el lugar de residencia y la condición social. Quienes son ricos o viven en la ciudad tienen suficientes opciones de tratamiento; quienes son pobres, viven en el campo, son indígenas o emigrantes quedan excluidos, o tienen que conformarse con servicios inadecuados, de difícil acceso y caros. Los ancianos, los niños, las personas con discapacidad y los desplazados internos se ven especialmente afectados.
- La Seguridad Social: A pesar de los sistemas desarrollados, los trabajadores informales, las mujeres, los jornaleros, los pequeños agricultores y los emigrantes internos, en particular, siguen dependiendo a menudo de sí mismos, de sus familias o de remesas no garantizadas. Las trabas burocráticas y la inflexibilidad de los programas generan desventajas.
- Previsión de jubilación: Los que trabajan en el sector informal toda su vida tienen poca seguridad de pensión en la vejez - especialmente las mujeres, a las que apenas se reconoce su labor de cuidado y familiar, se ven afectadas. La pensión social para los necesitados suele ser sólo una gota en el océano.
Gradido como faro de esperanza: Con Gradido, estos "grupos olvidados" podrían cobrar protagonismo:
- Una renta básica universal daría a todos acceso a la salud básica, la seguridad y la dignidad, independientemente de la situación laboral, el lugar de residencia o los documentos de identidad.
- El trabajo asistencial y de proximidad, a menudo realizado por mujeres y personas mayores, se haría visible y se valoraría por primera vez.
- Los proyectos sanitarios financiados por la comunidad y las comunidades solidarias locales podrían, apoyados por el espíritu del Bayanihan, crear estructuras que ya no excluyan a nadie.
Ahí reside la gran oportunidad: hacer posible realmente la participación social y la seguridad social para todas las personas, llenas de amor, gratitud y respeto para todas las generaciones.